Artículo de mIkel Goldstain-Todos los derechos
reservados. /12 de octubre de 2013-Barcelona.
No hay día, que un
simple ciudadano corriente y moliente, no se levante sin sentir que los poderes
facticos, les escupan en la cara con el peor y más humillante de los agravios.
Y la verdad, no es para menos. Puedes
levantarte un día, practicando el sublime ejercicio de la indiferencia o él de:
“mientras no me toque a mí”; una cosa
por lo común muy típica en este país de cabrones sin conciencia. (¿He dicho
cabrones…? Pido disculpas a los cabrones). Podemos ver el telediario o incluso
leer el periódico, el horrible crimen practicado por la indiferencia en las caníbales
aguas de Lampedusa. Parece ser que ahora las aguas de la Lampedusa, tienen
hambre de pobres parias, que no
tienen donde caerse muertos y son devorados por aguas hambrientas. Por qué, él que unas pobres
personas salgan de unos países de mierda ,para poder sobrevivir de cualquier
manera en cualquier lugar y les avisten tres patrulleras, ante sus narices, y
no les atiendan…tres patrulleras que debían guiar hijos de la gran puta ciegos,
porque no vieron personas en aquella fogata improvisada por la desesperación en
una embarcación de mala muerte: no vieron
hombres, mujeres, niños, etcétera. ¡Qué va! Estaban ciegos… ¿Para qué…si conmigo no va? Veo lo que quiero ver y oigo lo que quiero oír… Más, esta misma
indiferencia asesina y caníbal, volvió a repetirse nuevo a lo largo de esta
segunda semana de octubre de dos mil trece. Otra vez, volvió a ocurrir. Parece
ser que Durao Barroso, uno de esos trepas que han subido a lo alto de la pirámide,
solo ven lo que no debe salpicarles. Siempre se acuerdan de Santa Rita, cuando
truena y ya se sabe, cuando truena los que estaban en sus guaridas no reciben a
los de fuera. Pero a pesar de esos horribles crímenes y toda esa angustia de
personas que han muerto y sabían que iban a morir, en oscuras aguas lodosas, de
Lampedusa, allá en la hermosa Italia-, una belleza de burdel-, vámonos a
nuestra, querida España, o lo que se
supone que es este país, que a estas alturas yo no sé lo que es. Esta mañana me
levante con un nuevo escupitajo recibido
en la cara y yo no sabía, por qué. ¡Oh,
entonces comprendí! La señora Soraya Saenz de Santamaría, nos acusaba a
todos nosotros , los parados de practicar latrocinio…perdón a medio millón de
parados, de cinco millones declarados-el resto de parados ha huido espuertas de
este país, buscándose la vida como puede-…parece ser que medio millón de parados, unos sinvergüenzas se ve, estafan al
pobre estado, ese enorme estado , ese gobierno de santos no incluidos en el
santoral y que tanto hacen por nosotros, los parados, los trabajadores…bueno,
es un decir claro. Vamos por ahí estafando, incluso visitamos las oficinas de
eso que llaman el Instituto nacional de Empleo o lo que sea con una pistola
amenazamos al infeliz funcionario de turno, para nos tramite un subsidio de
paro, sino vendrá la Mafia Calabresa y ya verás…ya verás la que te cae. No voy hablar
de algunos funcionarios, pues a todos no los voy a meter en el mismo saco,
claro…Sinvergüenzas hay en todas partes, eso seguro…¡pero, Dios bendito, medio millón
de sinvergüenzas sin empleo, practican el latrocinio, contra nuestro gobierno
de ilustres ministros y el presidente ,cándido como la mismísima caperucita roja ,ay, los parados, que
malos somos. ¿Y para que vamos hablar de los que no percibimos nada, de los que
están desahuciados, de los que sobreviven de la caridad ajena, de amigos y
familiares, de los que no tienen donde caerse muerto? ¿Para qué hablar de los sinvergüenzas
del gobierno que con la connivencia de un señor llamado Bárcenas y vete a saber
quién más, han estado saqueando las cuentas de todo dios y todos siguen en su
sitio y nadie dimite? ¿Para qué hablar de un presidente, que no dimite, que está
casi probado que estaba al tanto del saqueo y demás, que está atrapado por sus
ministros corruptos y por sus asuntos personales? ¿Para qué hablar de Don Urdangarin
y la infanta Cristina, que han estado aprovechándose, supuestamente claro, de
las buenas intenciones de todos los demás, tirando de visas, viviendo en lujos
desmedidos, como si nunca hubieran probado eso, aprovechándose incluso de
asociaciones de discapacitados y demás….? ¿Para qué hablar de nuestro monarca,
que se fractura una cadera en Bosuana, en compañía, supuestamente, de una linda
alemana y más y más cosas…como haberle montado una casita, para sus encuentros
furtivos? ¿Para qué hablar de tantas cosas, incluso el fiscal general, que no
ve imputación de la infanta, aun cuando está más claro que las lodosas aguas de
Lampedusaa, que es más que evidente? ¿Para qué hablar de un país, que indulta
por dos veces, con el gobierno zapatero y luego Rajoy a mossos d’esquadra
torturadores, que permite que los policías de toda índole, campeen como en el FAER
West…un país que utiliza a la justicia
como si la ley fuera la libertad…en vez de pensar en su degeneración moral y ética…para
que hablar de asesinos con pedigrí que matan niñas adoptadas chinas, porque les
estorba? ¿Para qué hablar del señor Wert o Montoro, que hacen tan mal el ridículo.
que incluso dejan en ridículo al sentido del
ridículo o son tan malos como las películas de Almodovar? Para que
hablar…
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Skype: Damian48518
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